G-Power es uno de esos preparadores que se ha especializado, entre otras cosas, en sacarle todo el jugo cual cítrico a los motores más ácidos de BMW mediante la sobrealimentación. En este caso el elegido es el modelo más radical y rabioso del deportivo por excelencia, el BMW M3, y por supuesto su motor de ocho cilindros en uve del que ya les habíamos visto sacar más de 600 caballos. No obstante, en esta ocasión han querido ir un poco más allá demostrando que este V8 sobrealimentado se puede plantar perfectamente en 720 CV de potencia a 8.100 rpm (300 CV más que un M3 de serie) y un par máximo de 700 Nm a 5.900 rpm (un aumento de 280 Nm).
El G-Power M3 Tornado RS hace honor a su nombre y asegura prestaciones dignas de algún que otro superdeportivo. Vapulea el 0 a 100 km/h en 3.7 segundos (el mismo tiempo que necesita un Lamborghini Gallardo LP560-4) y se planta en los 200 km/h desde parado en sólo 9.5 segundos. El cliché de fiera de Autobahn le vendría que ni pintado si no fuera por que como ya sabemos el BMW M3 GTS ha renunciado a su banqueta de asientos trasera para incorporar una jaula de seguridad, quedando limitado a una disposición biplaza y por tanto mermada su practicidad.
Además de la correspondiente sobrealimentación, G-Power ha modificado por completo el motor y ha aumentado su cubicaje hasta los 4.6 litros. Para dosificar tanta potencia se ha optado por neumáticos Michelin Super Sport en llantas de 20” y de dimensiones 295/25 ZR en el eje posterior y 255/30 ZR en el eje anterior. Por supuesto tampoco podían faltar unos frenos cerámicos de 6 pistones y 396 mm delante y de 4 pistones y 380 mm detrás.
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