Si nada se tuerce, en 2013 veremos por primera vez a un coche eléctrico corriendo las 24 horas de Le Mans, el Green GT, un modelo dotado de una pila de combustible de hidrógeno que quiere mostrar que la evolución de estos sistemas está alcanzando un nivel más que importante en los últimos años.
Aunque se trata de un proyecto que da sus primeros y lentos pasos, sus responsables son ambiciosos respecto a las posibilidades y después de cancelar a última hora su participación en la edición 2012, han puesto su vista en la del próximo año. A pesar de que de momento no tienen ningún modelo finalizado, el nuevo sistema de propulsión mediante una pila de combustible ha sido probado por separado.
En este podemos ver el sonido del motor eléctrico y la pila de combustible, que se mueve en un régimen de entre 10.000 y 120.000 revoluciones por minuto, un sonido muy característico que es la primera vez que se deja escuchar en este modelo.
El Green GT H2 dispone de dos motores eléctricos de imán permanente que empujan desde el eje trasero con una potencia combinada de 340 kW (463 CV) y un par motor de 2.400 Nm. En cuanto a la energía, esta procede de dos depósitos de hidrógeno almacenados a 350 bares, que le proporcionan una capacidad equivalente a 264 kWh, suficientes para aguantar unos 40 minutos a ritmo de competición, mientras que la clave para ser minimanente competitivo, por lo menos en la categoría de prototipos, deberá lograr unos tiempos de repostaje lo más rápido posibles.
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